miércoles, 1 de diciembre de 2010

EL CHOFER Y LA DAMA. El fantasma de la carretera

EL CHOFER Y LA DAMA( Versión del fantasma de la carretera según  se cuenta en la sierra norte de Puebla)

 
Publicado en el libro Leyendas con Sabor a Puebla por el autor



Se dijo muchas veces hace años, entre todos los conductores de automóviles y camiones que recorrían el tramo comprendido entre Ocotepec y El Rosario de la carretera federal Amozoc- Nautla, que al pasar por el lugar conocido como “El Columpio” que es una “curva recta” ubicada cerca del pueblo de Cuyoaco, que a altas horas de la noche se veía a una mujer hermosa pidiendo el “ray”a los choferes.



Se decía que fueron muchos los que aceptaron la petición de la dama tal vez por caballerosidad, aunque habría muchos que seguramente la aceptaron buscando una aventura. Cada vez que se suscitaba algún accidente automovilístico, sobre todo en la curva de Acuaco y había algún deceso, de inmediato se le trataba de encontrar relación con la mujer del Columpio.



Algunos contaban haber visto a la mujer, otros haberla subido a su vehículo auto motor y haber vivido cosas extrañas, unos se hallaban preocupados al pasar por el lugar, aunque es menester decirlo, para muchos esos comentarios no tenían la menor importancia.





Asi ls cosas, un chofer muy conocido de mi pueblo, quien se dedicaba al transporte de frutas tropicales y de temporada, comentó que a el le gustaba viajar solo, lo cual prefería hacer de noche, por lo que una de ellas, en un viaje que hacía de vacío de la ciudad de Puebla a su casa, al ir pasando por aquel lugar vio a una mujer a lo lejos y esta le hizo la parada. El hombre optó por no detenerse ya que era sumamente cuidadoso en cosas de aventurarse con mujeres de la vida galante, como desde un principio consideró a aquella dama.



Aceleró el camión, pero cuando quiso ver por el espejo lateral para percatarse de haber dejado lejos a la mujer, vio que iba subida en el estribo del lado derecho. Sintió un sudor frío y comenzó a temblar pero sintió peor aun cuando vio que ésta estaba sentada a su lado.



Por si eso fuera poco el rostro de aquella mujer en apariencia bello, poco a poco se fue transformando hasta convertirse en la cara de una bestia.



En esa difícil situación el hombre sacó fuerzas de flaqueza y de esta manera logró controlar el camión durante un corto trayecto, sintiendo como el motor del camión parecía ir a marchas forzadas. De un momento a otro el hombre sintió como el camión se aligeraba y al mirar hacia donde iba sentada la aparición aquella, descubrió que esta había desaparecido.



Al darse cuenta donde estaba, sus ojos descubrieron atónitos solo cruces y lápidas desde la ventanilla, ya que el camión pasaba en ese momento frente a un cementerio.





El hombre, sin poder dar crédito a lo que le acababa de ocurrir siguió su marcha y llegó a su destino, pero cuando quiso relatar a su familia aquellos hechos, de su boca no salió ni una sola palabra, aquella experiencia lo había hecho enmudecer.



Fueron muchos años los que pasaron, pero antes de que falleciera, aquel chofer pudo recuperar el habla como por milagro. De esta manera pudo relatar a su familia y a sus amigos la terrible historia que vivió aquella noche.








1 comentario:

Anónimo dijo...

esta genial la leyenda ¡¡¡¡¡¡
me ayudo a un proyecto
gracias
:)